Sobre mi…
Me gusta jugar, expresar con el cuerpo, con la voz, con el corazón. Elaborar la emoción hasta deformarla, transformarme con sentido del humor, imbuirme en lo absurdo y dejarme llevar por el canto y la sinrazón. Me gusta sorprenderme.
Me gusta nutrirme de monte, dejarme sentir en contacto con la naturaleza, bañarme de bosque, oler a tierra, descalzarme en la hierba, abrirme al sol, sentir en el vientre el movimiento de la savia del árbol, oír el viento, poner atención a lo pequeño, lo imperceptible, lo efímero del terreno o ampliar la panorámica a vista de pájaro.
Me gusta el silencio, sentir la respiración lenta y profunda, me gusta la soledad tanto como la relación, verme en el otro, palpitar con el grupo, sentirme parte de la diversificación, me atrae mezclar lo nuevo y lo viejo en lo creativo, reciclar, me gusta la innovación.
Me gustan las personas en su esencia, conocer sus historias de vida, sus luces y sombras, acompañarlas en su viaje de transformación, en su camino de sanación y renovarme con ellas, dichosa por vivir un proceso de enamoramiento con cada profunda e íntima relación que establezco desde mi labor.